Soledad Quereilhac, esposa de Axel Kicillof, dejó en claro el día de la asunción que no quiere que llamen primera dama. “Mi remera no dice ni primera, ni dama, primera no porque no estoy delante de ninguna mujer, y dama no porque es un término muy clasista”, explicó a la prensa con un sentido común absoluto.
Quereilhac es mamá de León y Andrés, doctora en Letras y cinturón negro de taekwondo, y también dejó en claro que prefiere que con los medios hable su marido que es, al fin de cuentas, el gobernador.