En este año horrible por la pandemia que acecha al mundo, con músicos que padecieron no poder tocar frente a su publico, con clubes de jazz que bajaron sus persianas, muchos de nosotros, encerrados en nuestros hogares, pudimos disfrutar de la decenas de discos que se siguieron publicando.
Por supuesto es imposible o mejor dicho tedioso elegir las 10 mejores grabaciones y dejar afuera decenas de hermosos discos pero aquí van los del top ten de esta modesta sección de Info135.
En este año de aislamiento muchos pianistas grabaron sus discos de solo piano. El genial Brad Mehldau grabó su Suite: April 2020 en Holanda donde se traslado con toda su familia. Hermoso disco donde como dice en su portada trató de “plasmar en el piano algunas experiencias y sentimientos que son nuevos y comunes a muchos de nosotros”. Fred Hersch también se encerró a grabar su álbum de solo piano: Songs From Home, un trabajo reflexivo sobre el momento que se vive en el mundo. Pero en esta crónica elegimos el disco en solitario de Alan Pasqua Day Dream, un disco maravilloso y excepcional para integrar esta lista.
Si tocas jazz soñas con grabar tu música en el Village Vanguard, el histórico club de New York. El gran Gerald Clayton publicó este año Happening: Live at the Village Vanguard, un maravilloso disco con toda la modernidad de sus composiciones y algunos standard. El pianista está sólidamente acompañado por el saxo alto de Loran Richardson y el tener de Walter Smith III, además de Joe Sanders en contrabajo y Marcus Gilbert en batería.
J.D. Allen es uno de los grandes saxofonista de los últimos años. Los aficionados estaban encantados, antes de la pandemia, de escuchar a este gran músico en los bares de Greenwich Village o Brooklyn. Su reciente lanzamiento “Toys / Die Dreaming”, es u decimocuarto como líder, acompañado por los jóvenes y talentosos Ian Kenselaar en contrabajo y Nic Cacioppo en batería. Gran disco de este músico que toma lo mejor de la tradición de Coltrane y Rollins pero con vuelo propio. Tradición y modernidad es su sello.
Joel Ross, el joven vibrafonista del momento en la escena de New York publicó este año su segundo disco Who Are You?, en el sello Blue Note. Un brillante álbum que te deja sin aliento desde la primera nota. Acompañado por el pianista Jeremy Corren, el saxofonista Inmanuel Wilkins, el contrabajista Kanoa Mendehall y el baterista Jeremy Dutton. Un gran compositor que marca el ritmo junto a otros jóvenes cómo Wilkins, Makaya McCraven y Marquis Hill que vienen señalando el camino de la nueva escena del jazz americano.
En el turno de los grandes discos de baladas encontramos a Jeremy Pelt y a Jimmy Heath. El trompetista grabó un hermoso disco The Art of Intimacy, Vol.1, acompañado por el gran George Cables en piano y Peter Washington en contrabajo. Hermosas melodías con bellísimos arreglos. El segundo disco de baladas se llama Lover Letter y es el ultimo trabajo de Jimmy Heath con sus jóvenes 93 años. El músico, recientemente fallecido, nos deja este maravilloso disco de grandes baladas.
To The Earth, el último trabajo de Dinosaur, la banda inglesa liderada por la trompetista Laura Jurd es uno de los grandes acontecimientos del año. Desde hace años los británicos están cautivados por esta joven trompetista que compone y toca su propia música. Su ultimo trabajo deja lo electrónico para concentrarse en lo acústico. Lo mejor del jazz británico, vanguardista pero alejado del free. Las composiciones de Jurd son de alto bueno con un estilo propio y en su forma de tocar la trompeta aparece muchas veces su admirado Miles Davis.
El gran contrabajista italiano Ferdinando Romano, instalado hace tiempo en los países nórdicos publicó Totem, un tremendo disco, acompañado por Ralph Alessi en trompeta. La música del disco fluye con una dinámica propia que cautiva el oido desde la primera nota. Un músico poco conocido en Argentina pero que merece ser escuchado. Toma sus raíces italianas pero trabaja sin dudarlo con un sonido cercano al sello ECM. A romano lo acompañan, además de Alessi, Tommaso Iacoviell en flugelhorn, Simone Alessandrini en saxo alto y soprano, Nazareno Caputo en vibráfono y marimba, Manuel Magrini en piano y Giovanni Paolo Liguori en batería.
Como todos los años aparecen grabaciones inéditas de los grandes del jazz. Tres llamaron la atención. El disco quizás más esperado fue Thelonious Monk en Palo Alto. Una grabación del año 1968 con su histórico cuarteto, considerados por muchos críticos como una de las mejores grabaciones en vivo de Monk. El segundo álbum es Sonny Rollins Rollins en Holland (1967), dos horas de grabación, parte en vivo y parte en estudio, de uno de los periodos menos documentados del gran saxofonista. La grabación en trio es maravillosa y el mismo Rollins festejo que el sello Resonance la haya encontrado y publicado. El tercer gran disco de los consagrados es una grabación de George Coleman Quintet in Baltimore de 1971. Un Coleman fantástico, en su mejor momento, superior incluso a su época con Miles Davis. De los tres grandes nos quedamos con este.
Un capítulo especial son las grandes grabaciones que disfrutamos del jazz argentino. Podemos mencionar el disco en trio del baterista Sergio Verdinelli “No me digas loco”, acompañado por Ernesto Jodos y Mauricio Dawid. La publicación de Earlier Trips, una grabación del 2001 de Ernesto Jodos junto a Matt Pavolka, Jeff Hirschfield y el saxofonista Donny McCaslin. Hermosa grabación editada por primera vez este año.
Fueron muchas las grabaciones en la Argentina, pero nos vamos a quedar con dos discos. El primero New Aurora, de Michael Sarian, hermoso disco de este gran trompetista argentino que reside en New York. El segundo álbum seleccionado es Sin Tiempo, discazo de Leo Genovese, Mariano Otero y Sergio Verdinelli.
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