Reapareció Hilda “Chiche” Duhalde para opinar que “la vieja dirigencia política se tiene que terminar”, y aprovechó para lanzar, con tono apocalíptico, que “la sociedad argentina, peronista y no peronista, está cada vez más enojada”, y casi como una expresión de deseos, aseguró que “cuando la sociedad se enoja, las cosas se ponen feas”.
“Por lo tanto –agregó-, yo no creo que un sistema así pueda perdurar porque nuestro país no se lo merece. Veremos lo que somos capaces de parir los argentinos de bien. Yo aspiro a que haya muchos dirigentes jóvenes, sin mañas viejas y con ganas de cambiar la Argentina”.
Entrevistada en LN+, la ex primera dama dijo que “hay muchos dirigentes que están absorbidos por la corrupción”, y que “gran parte de la sociedad argentina acepta y mira para otro lado”.
“Hay leyes de transparencia que duermen en el Congreso y no se tratan. Todos serán parches si no terminamos con la corrupción y la drogadicción en la Argentina”, advirtió entonces, luego de decir que estos son los dos grandes problemas del país.
La esposa de Eduardo Duhalde apuntó contra el ex vicepresidente Amado Boudou, y se indignó por el hecho de que “todavía alguien se atreva a defenderlo”. “Tengan la dignidad de reconocer que es un caso juzgado”, lanzó. “La corrupción se ha hecho carne de una gran parte de la sociedad argentina, de todos los partidos políticos y de todos los sectores. Es importante que la Argentina renazca”.
Entonces, además de criticar a quienes salen a defender este tipo de cuestiones, apuntó contra quienes callan: “Por acción, omisión, por miedo o lo que fuere todos cierran la boca y yo a mi edad, y sin ocupar ningún cargo, tengo la obligación de decir lo que pienso. No quiero ver de esta manera al país, en el que viven mis hijos y mis nietos. Se va hundiendo día a día”.
Por otra parte, planteó que el país “no puede funcionar” con tantos planes sociales. “Tenemos que ir a un solo plan social de emergencia”, sugirió.