El Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) convocó a dos audiencias públicas para analizar las propuestas de las concesionarias del servicio de distribución del Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba), para “obtener una adecuación transitoria en la tarifa” y, en el mismo sentido, escuchar las posturas de las empresas encargadas del servicio de transporte de energía eléctrica en todo el país.
El encuentro entre el Estado y los privados se llevará a cabo el viernes 26 próximo desde las 8.30 mediante una plataforma digital, y “su desarrollo se trasmitirá en simultáneo a través de una plataforma de streaming, la que será informada en la página web: https://www.argentina.gob.ar/enre”.
Podrá participar “toda persona física o jurídica, pública o privada que invoque un derecho subjetivo, interés simple o derecho de incidencia colectiva”; mientras que las personas jurídicas, organismos o entidades interesadas “podrán participar por medio de sus representantes, acreditando personería mediante el instrumento legal correspondiente -debidamente certificado-, admitiéndose la intervención de un solo orador en su nombre”.
A tales fines deberán inscribirse vía web en el correspondiente Registro de Participantes que estará habilitado desde el 8 hasta el 23 de enero.
En tanto, el lunes 29, a la misma hora, se evaluarán las propuestas de las transportistas Transener, Transba, Transpa, Transco, Transnea, Transnoa, Distrocuyo y el Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN).
Tras la publicación de la presente resolución en el Boletín Oficial, EDENOR y EDESUR deberán presentar en el plazo de cinco días sus propuestas de adecuación tarifaria.
Si bien lo que se trate en las audiencias públicas no es vinculante, es el paso legal previo a los aumentos en las tarifas. En el caso del gas, el Gobierno convocó para el próximo lunes 8 a la reunión para comenzar a definir el ajuste del servicio.
El plan en el que trabaja el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, -por orden del ministro de Economía, Luis Caputo- contempla un cambio en el criterio de la asistencia: se focalizará en los sectores de menores ingresos con un tope de consumo subsidiado por mes, que dependerá de la capacidad de pago, mientras que por el excedente pagarán tarifa plena. Los subsidios serán destinados solo a una parte de la demanda. Otro punto importante del nuevo esquema será la recalibración de los contratos con las empresas del sector para que menores costos se reflejan en tarifas más bajas.