Con el objetivo eliminar cualquier prueba, y así fomentar la evasión fiscal, Javier Milei confirmó que el Gobierno está trabajando para eliminar las bases de datos de las casi 300 mil cuentas de argentinos que accedieron al blanqueo de capitales por una cifra que, hasta octubre, fue de 19.000 millones de dólares.
El presidente respondió a una publicación en X del periodista Lucas Morando, que dice: “Después de que hayan blanqueado 280 mil personas, el Gobierno analiza modificar la legislación para borrar las bases de datos de los que blanquearon. Es decir, eliminar los registros fiscales para evitar futuros impuestos”.
A esas palabras, Milei contestó: “Estamos trabajando arduamente en ello para lograrlo”. En otras palabras, confirmó que, efectivamente, el objetivo es destruir los registros correspondientes al blanqueo de capitales.
Días atrás, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció la prórroga de la primera etapa del blanqueo fiscal debido a inconvenientes informáticos y administrativos en transferencias desde el exterior. Así, quienes deseen regularizar su patrimonio tendrán hasta el 8 de noviembre próximo. La segunda fase de este plan se desarrollará del 9 de noviembre al 7 de febrero de 2025, y la tercera entre el 8 de febrero y el 7 de mayo del mismo año.
Según datos del Banco Central, desde el inicio del blanqueo, los depósitos bancarios en dólares del sector privado registraron un ingreso neto de 18.000 millones de dólares.
Esta cifra fue confirmada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien calificó la medida como un éxito y destacó su efecto positivo en el mercado financiero, donde el aumento en la compra de títulos públicos y acciones redujo el riesgo país a menos de 1000 puntos.
Para experto en impuestos, Sebastián Domínguez, CEO de SDC Asesores Tributarios, la destrucción de las bases de datos no es una solución acertada: “Lo que se debe hacer, es que esa información esté encriptada, que no puedan acceder terceros, por una cuestión de secreto fiscal”, opinó.
Y recordó que el blanqueo libera de impuestos a ciertos contribuyentes, siempre que su situación encuadre dentro de la reglamentación. “ARCA debe tener la posibilidad de verificar casos particulares en caso de ser necesario”, subrayó, por lo que “lo razonable sería entonces que esa información exista, pero que no sea accesible a cualquiera, como pasó en el gobierno de Macri, cuando algunos pudieron acceder a esa información”.
Por otro lado, el contador aclaró que, aunque se eliminen las bases de datos, aún así seguirá habiendo información sobre los bienes blanqueados.
“Cuando se presente la declaración jurada de Ganancias; en la declaración los contribuyentes van a tener que poner el incremento patrimonial de lo que declararon en el blanqueo. Ahí va a estar declarado, en Ganancias, como un ingreso que no va a tributar. No es solamente que la información del blanqueo surge de la presentación en el marco de ese programa; sino que, para quienes presentan Ganancias va a haber una declaración jurada en las que también lo van a tener que incluir”, precisó.