El diputado nacional Máximo Kirchner salió muy fuerte al cruce del Gobierno nacional por los incidentes en Santa Cruz, en los que la policía provincial reprimió a los trabajadores que protestaban frente a la Gobernación y que quisieron ingresar a la residencia oficial de Alicia Kirchner, donde estaba la ex presidenta Cristina Kirchner. “El que metió la cola fue el Gobierno nacional y está mas que claro”, señaló el hijo de la ex presidenta.
Entrevistado por programa “El fin de la metáfora”, en Radio 10, Máximo destacó que “estaba planificado. Da bronca porque pudo haber terminado mal para los que estaban adentro y para los que estaban afuera protestando”.
“Yo creo que el Presidente es una persona que no tiene límites”, señaló Máximo Kirchner al responsabilizar a Macri por los incidentes. También se mostró molesto con el tuit del Jefe de Estado en el que condena la violencia en Santa Cruz.Apuntó que Macri era “un cínico y un hipócrita con lo que tuiteó”.
El diputado enumeró protestas anteriores en la Provincia, que terminaron sin episodios de violencia. “Antes hubo dos marchas en las que no hubo ningún tipo de incidentes. No se reprimió en ningún momento hasta que hubo la rotura de portones, rejas y patearon la puerta para querer entrar”, insistió Máximo. El diputado destacó “la templanza de Alicia, el coraje y valentía de Cristina de quedarse adentro”. Y se preguntó: “¿Qué van a hacer si entran?”.
A su vez, personificó en la figura del Jefe de Gabinete, Marcos Peña, el “ataque”. “La presencia de Cristina fue destacada por el gobierno nacional, Macri o su alter ego, Marcos Peña” y en otro pasaje de la entrevista fustigó: “el Jefe de Gabinete es amo y señor en la Casa Rosada y en Olivos también”.
“Acá no hay ni un detenido por los incidentes de ayer”, resaltó Kirchner y señaló que “si no hubiera estado Cristina en el interior de la residencia el nivel de virulencia planificado habría sido otro”.
Alicia Kirchner contó cómo fue el ataque a su vivienda. La gobernadora de Santa Cruz contó como fue el “ataque planificado” a la residencia oficial local por parte de un grupo de manifestantes, en momentos en que estaba en el lugar la expresidente Cristina de Kirchner. “Quieren mi cabeza” para la campaña electoral, dijo la gobernadora. “Eramos cinco mujeres solas con una bebé de 18 meses” en la vivienda, incluida la exjefa de Estadoy su nieta, sostuvo la mandataria patagónica al relatar los hechos que se sucedieron durante una protesta que en la noche del pasado viernes se realizó frente a la residencia que ocupa en la ciudad de Río Gallegos.
En declaraciones a Radio 10, Alicia Kirchner rechazó que haya habido “represión” durante la manifestación que, según precisó, se desarrolló desde las 21 hasta las 3 de esta madrugada. “Jamás voy a ejercer la represión. Lo que se ha hecho es un ataque y querían entrar a la vivienda. Hacer una marcha, cortar una calle, todo está bien, pero querer entrar a una casa es una barbaridad. Rompieron vidrios y puertas, el cordón de la vereda, rompieron el nicho de gas”, subrayó la referente del Frente para la Victoria, quien precisó que “hubo dos personas que fueron atendidas en el hospital”.
En ese sentido, insistió en que “querer entrar a la fuerza en una casa ya forma parte de un ataque planificado”.
“Quizás recibieron instrucciones de (el consultor ecuatoriano Jaime) Durán Barba y quieren mi cabeza para la campaña electoral. Qué bueno sería para Durán Barba afirmar ´Alicia Kirchner se tuvo que ir de Santa Cruz´ para la campaña nacional” del oficialismo, planteó, al tiempo que se quejó por ser víctima de una presunta “persecución política”.
Consultada sobre la visión de la expresidenta ante los incidentes y la situación que atraviesa la provincia patagónica: “Cristina está absolutamente preocupada y se da cuenta muy bien de qué han querido hacer, querían mi cabeza, no tengan ninguna duda. Siempre están hostigando lo que fue el proyecto nacional”.
Asimismo, Alicia Kirchner reclamó al Gobierno nacional que le apruebe la posibilidad de emitir deuda por 350 millones de dólares y así sortear la situación provincial, a la que definió como “en estado crítico”.
“Tengo un déficit de 6.713 millones de pesos. Esta situación la conoce el Gobierno nacional. Yo necesito ayuda, es más estoy con el trámite de un bono que espero que pueda salir en 50 días. Vamos a salir, pero también necesito el apoyo de la Nación. Casi todas las provincias pudieron endeudarse, yo todavía no”, se quejó Alicia Kirchner.
Y finalizó: “Cómo no voy a estar desesperada o preocupada, porque realmente siento la necesidad de la gente, no es que no la siento. Me coloco al lado de mi pueblo”.