La recesión no parece tener freno y los supermercados son el termómetro claro de cómo se sigue derrumbando el consumo: el primer trimestre de 2017 registró una caída del 15,7 por ciento, con una fuerte disminución de ventas en cadenas con precios más accesibles.
Según un informe de la Dirección General de Estadística y Censo del gobierno porteño, asimismo, entre octubre y diciembre de 2016 las ventas de alimentos en supermercados experimentaron una caída del 6,1% contra igual período del 2015.
Este año, en tanto, la venta de alimentos registró una ligera suba del 0,3% en la comparación interanual.
Los datos surgieron de los resultados de los indicadores de ventas basados en información fiscal correspondientes al primer trimestre de 2017.
Los restaurantes también registraron una caída, que entre enero y marzo de este año fue del 1,8% ante el mismo período de 2016.
Asimismo, los locales de comidas rápidas, que suelen ser más económicos, se verificó un repunte del 5,5%, luego de tres trimestres de bajas.
También hubo una fuerte caída en el rubro telefonía móvil, donde las ventas experimentaron una baja del 2,2% en la medición interanual del primer trimestre, mientras que en jugueterías hubo un incremento del 4,3%.