El queridísimo actor en una extensa entrevista realizada por el diario Infobae hablo de su carrera profesional, de sus trabajos del último año actoral y también de política.
Parte del reportaje:
—¿Cómo viviste esta semana argentina?
—Con mucha inquietud, con mucho dolor. No hace falta más que ver la oposición de la gente en un número enorme en todo el país. Creo que es muy perverso pretender que la gente se quede con los cincuenta o cien que tiraban piedras contra la importancia de lo que se está resolviendo ahí adentro. Es mucho más grave lo que han resuelto dentro del recinto que las escenas de violencia. Sobre todo porque hubo una gran cantidad de gente que se manifestó en paz, que lo volvió a hacer, que lo siguió haciendo y que creo que lo va a seguir haciendo. Y me preocupa que el gobierno no registre eso, que se quede con los grupos minúsculos que siempre existen básicamente de infiltrados, no solamente pero básicamente de infiltrados, para justificar la represión que tienen decidida desatar cada vez que hay una protesta popular.
—¿Creés que se puede resolver?
—Sí, con diputados que pongan lo que hay que poner arriba de la mesa y defender lo que prometieron que iban a defender cuando los votaron. Sobre todo aquellos que se han dado vuelta.
—¿Qué extrañás de Cristina?
—(Risas) A ella la extraño. Sus políticas, su mirada frente al problema geográfico, político económico del mundo. Tiene conocimientos sobre eso que no le escucho hablar a nadie. Su decisión de defender el interés de los argentinos. Podría nombrar un montón de cosas, pero ahora estamos lamentando que se vuelvan a ir los científicos, haber perdido los satélites, el valor adquisitivo del sueldo que siempre estaba por encima de la inflación porque había paritarias, no hay más paritarias, que la gente pudiera expresarse y salir y protestar e insultarla y decirle todas las cosas que le decían y no le pegaban a nadie, no lo metían preso, no iban a buscar a nadie que pusiera un twitter a su casa y lo metían preso, no se mataba a los indios por la espalda, no se mataba a nadie.
—¿Te enojan los que acompañaban y se bajaron del barco?
—Ah sí, claro. Yo creo de verdad que no hay neoliberalismo sin traición.
—¿Cómo sería eso?
—Es eso, esta vuelta al neoliberalismo está avalada por un montón de tránsfugas que le dan su voto por temor, porque los aprietan los gobernadores, por lo que sea. Por el miedo al carpetazo. Pero que han sido votados para otras cosas. Pero bueno, sí, siempre indigna más la traición interna.
—¿Eso te pasa con la corrupción también?
—No. La corrupción es un tema con el que quieren correr para no hablar de las políticas de verdad. Y la corrupción no la inventó el kirchnerismo, ni siquiera la inventó la política ni los políticos, porque nunca se habla de la otra parte de la corrupción que es la del corruptor.
—Las empresas.
—Los corruptores no son los políticos, los corruptores son los privados. De esos no hablan. Pareciera que es lógico, que está bien, que es normal. Cristina propuso auditar la obra pública entera, no quieren ¿Por qué será?
—¿Si charlamos en cinco años y salió todo genial cómo te voy a encontrar?
—Me vas a encontrar feliz seguramente. Estoy bastante conforme con la vida que he hecho, me ha ido mucho mejor de lo que soñaba. He crecido, he podido hacer trabajos que a mí me gustaron y he podido trabajar con gente invalorable, gente muy talentosa, muy querida. Tengo tres hijos, una familia.
—¿Y qué país tendremos en ese momento?
—No estoy muy optimista. Porque veo lo que pasa en el mundo además. Si no hubiera en el mundo tanto presidente, tanto político que a mí juicio no está preparado para eso creería que estas cosas solo ocurren en la Argentina pero no, ocurren en muchos lugares del mundo. El giro a la derecha es terrible, angustiante. El neoliberalismo es algo muy perverso porque propone no modificar nada, dejar las cosas como están. Que el que nació en Barrio Norte y el que nació en el Sur del Conurbano no puedan acceder a lo mismo. Además lo dicen con todas las letras, los funcionarios y gente cercana a este gobierno lo dice así, que el kirchnerismo le hizo creer a la gente que con su sueldo podían comprar televisores, podían irse de vacaciones, podían cambiar el auto. Es a lo que aspira cualquier trabajador ¿No? Desde que yo nací mi viejo que era empleado público quería poder llevarnos de vacaciones y no podía todos los años, pero había años que podía. Y quería cambiar el auto y a veces no lo podía cambiar pero a veces lo cambiaba. Todo el mundo tiene derecho a progresar, quiero un gobierno que actúe en esa dirección
—¿No crees que nos vayamos a amigar en el corto plazo los argentinos?
—¿Amigar con qué? Hay ideas con las que yo no me voy a amigar nunca.
—¿No podés tener un amigo que esté de acuerdo con el neoliberalismo?
—Sí, pero no me voy a amigar con su idea. Sí, tengo amigos que piensan distinto que yo. Amigos de la infancia con los que me veo, con los que discuto. Pero porque es así, hay distancias reales entre un pensamiento y el otro. La diferencia que hay entre que un Estado se ocupe o que se ocupe el mercado es enorme. Yo no me voy a reconciliar nunca con aquel que cree que de verdad el mercado resuelve todo.
El reportaje completo
https://www.infobae.com/teleshow/infoshow/2017/12/23/dario-grandinetti-extrano-a-cristina-kirchner/