La fórmula FF-2019 dinamitó la Casa Rosada y Vidal asume que pierde la Provincia

Por Alfredo Silletta. La fórmula de Alberto Fernández-Cristina Kirchner no solo implosionó el espacio de Alternativa Federal, sino que estalló como una granada en las manos de Cambiemos. Las primeras encuestas dicen que la fórmula FF-2019 creció entre dos o tres puntos, casi orillando ganar en primera vuelta.  Ahora la pelota está en la Casa Rosada que tiene dos problemas, además del desastre económico, que es resolver si Mauricio Macri va por la reelección o decide bajarse y apoyar la candidatura de María Eugenia Vidal.

El mayor problema hoy es que el presidente no sube en las encuestas, especialmente está muy mal en la provincia de Buenos Aires. Desde la Gobernación reconocieron que en un mano a mano Vidal todavía le gana a Axel Kicillof pero cuando se mide la boleta completa pierde por seis puntos frente al peronismo.

De allí, que el presidente necesita que haya una tercera fuerza competitiva que le quite votos al peronismo. No piensan tanto en Roberto Lavagna, que hoy sólo cuanta con el apoyo del socialismo y el GEN y que para desgracia de Macri le quita votos a Cambiemos, sino en Alternativa Federal. El laboratorio del PRO, necesita que haya otra fórmula peronista, de allí que el “amigo del alma” del presidente, Juan Schiaretti, luego de su reunión en la Rosada, salió a romper con Lavagna y formuló que la interna de Alternativa Federal debería ser con Sergio Massa, Juan Manuel Urtubey, Daniel Scioli y Marcelo Tinelli.

La jugada por ahora no funcionó. El conductor de Showmach no puede ser candidato a nada por una cláusula firmada en Canal 13, con lo cual debería renunciar a su programa televisivo. Por su parte, Daniel Scioli, fiel a su estilo, con pocas palabras, apareció ayer en un acto junto a Leonardo Nardini, intendente de Malvinas Argentinas, para que nadie dude qué quiere PASO pero dentro del peronismo contra Alberto y Cristina.

Como si fuera poco, ayer no fue ningún gobernador a la reunión de Alternativa Federal y en su mayoría jugarán con Fernández. Massa no sabemos qué hará, pero el próximo 30 de mayo se realiza el congreso del Frente Renovador y ahí sus principales espadas bonaerenses -Julio Zamora y Jorge D’Onofrio- vienen gritando a los cuatro vientos que quieren unidad con el peronismo.

Volviendo a Cambiemos, el presidente por ahora sigue convencido de ser el candidato presidencial, más allá de la presión de Wall Street y los medios hegemónicos que están haciendo una campaña vergonzosa para que se baje. El presidente volvió a pedirle a Jaime Duran Barba que realice una nueva medición para la última quincena de junio y ahí tomará una decisión.

Una posibilidad que se comenzó a barajar nuevamente en el circulo del presidente es que la fórmula presidencial sea Macri-Vidal, algo que el año pasado horrorizaba a la gobernadora, pero que ahora no lo descarta. “Si vamos a perder la gobernación, mejor la vicepresidencia”,dicen en su círculo intimo.

Pese a la presión, desde este portal hemos señalado que el presidente no se bajará de su candidatura. No piensa como un estadista, algo que hizo Cristina el pasado sábado, sino como un egocéntrico que todo en la vida pasa por él. Macri utiliza el discurso del psicópata, niega y tergiversa lo  que percibimos, no se responsabiliza por sus actos, sino que siempre la culpa es de los otros y no se detiene en la manipulación y la crueldad. Quizás lo vimos el otro día cuando mintió sobre las 5 millones de computadoras entregadas a los chicos por el plan Conectar Igualdad sobre qué no había conectividad y la comparó con ‘tirarle’ una tira de asado a los pobres.

Están nerviosos, pero el problema no es Alberto Fernández-Cristina Kirchner, el problema es que millones de argentinos pasaron a la pobreza, en muchos casos con hambre, por culpa de las políticas implementadas por Cambiemos.