Waldo Wolff hizo denodados esfuerzos por intentar explicar por qué su bancada de Juntos por el Cambio se negó a debatir una ley que, como el etiquetado frontal, cuenta con el apoyo de todos los sectores de la sociedad, a excepción del lobby de las empresas alimenticias.
Fue anoche en A24, oportunidad en la que la conductora Romina Manguel le enrostró la irresponsabilidad de la oposición en no debatir el proyecto.
Ayer bastó que sea el oficialismo el que proponga la votación, para que los legisladores de Juntos hicieran una actuación sobre republicanismo y formas parlamentarias que poco tienen que ver con el asunto a tratar.
Para tratar de aminorar el descontento generado por la negativa a dar quorum, Woff intentó explicar lo inexplicable, enredándose en laberintos bizantinos e incomprensibles, hasta que la periodista lo frenó con sentido común, reclamándole madurez política.
Según Wolff, “es una mentira que estemos a favor de las corporaciones. El único mensaje que tiene el oficialismo es confrontar”, ante lo cual, Manguel disparó: “¿No es mejor bajar y discutir?”, pero el diputado hizo gala de su hipocresía, al sostener: “Yo quiero tratar la ley de etiquetado, y la voy a votar a favor. Lo que no puedo permitir es que el oficialismo nos imponga la agenda”.