“Sé dócil: oración y obediencia” es un extraordinario documental de Netflix que investiga el accionar de la Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (IFSUD) y su líder, Warren Jeffs, considerado por sus seguidores como “el último profeta”.
A lo largo de cuatro capítulos, dirigidos por la galardonada cineasta Rachel Dretzin (ganadora de los premios Emmy y Peabody), se reconstruye con detalle una historia real de manipulación, violencia y crímenes sistemáticos ocurridos en los Estados Unidos.
La IFSUD es una secta escindida de la iglesia mormona, formada en 1890, cuando el mormonismo oficial decidió prohibir la poligamia. En respuesta, este grupo separatista se consolidó con la creencia de que la salvación se alcanza a través de tener múltiples esposas.
Sus principales comunidades se desarrollaron en el estado de Texas, en la ciudad de Hildale (Utah) y en Colorado City (Arizona). En estos enclaves, se impusieron normas extremadamente rígidas, especialmente sobre mujeres y niñas, que eran controladas en todos los aspectos: vestimenta, embarazos, vínculos afectivos y hasta el pensamiento.
El documental se centra en la figura de Warren Jeffs, el autoproclamado profeta que gobernaba la comunidad con autoridad absoluta. Actualmente está condenado a cadena perpetua, acusado de haber violado a niñas y adolescentes, y de haber facilitado decenas de abusos sexuales dentro del grupo.
La serie retrata con crudeza el entramado de poder, coerción y fe malversada que permitió estos crímenes durante años, así como el proceso de valentía y ruptura de algunas víctimas, que decidieron denunciarlo públicamente y colaborar con la justicia.
“Sé dócil: oración y obediencia” es un documental imprescindible para entender cómo funcionan las sectas religiosas, cómo manipulan la fe, el miedo y la obediencia, y qué impacto devastador pueden tener en la vida de cientos de personas.