En las próximas horas, el Gobierno presentará el borrador de un proyecto de ley para que las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) previstas para el 8 de agosto se posterguen para el 12 de septiembre, y las generales del 24 de octubre se celebren el 14 de noviembre.
Pero sin lugar a dudas lo novedoso fue que se llegó a un principio de acuerdo con los referentes de Juntos por el Cambio que, contrariamente a lo que vienen levantando como bandera (oponerse a todo lo que plantee el oficialismo), dieron luz verde a la medida.
Es que, a la luz del dramático contexto que se vive por el incesante crecimiento de contagios en el marco de la segunda ola de coronavirus con récord de casos día tras día, a la oposición no le quedaba demasiado margen de maniobra como para intentar oponerse a la idea de la postergación por razones sanitarias, que es precisamente el motivo central del aplazamiento.
Además, el Gobierno de hecho aceptó el pedido de la oposición respecto a que la modificación de la fecha de las elecciones sea a través de un proyecto de ley que presente el Frente de Todos.
Consultado sobre los cambios en el sistema electoral, el ministro de Interior, Wado de Pedro, señaló que “se conversaron esos temas. Lo que tenga que ver con discusiones de modificaciones al sistema electoral, y reformas más profundas tiene que ser discutidas fuera de este calendario electoral. Se mostró una buena voluntad de los dos lados para después de la elección constituir una comisión entre el ministerio y el Parlamento para mejorar el sistema”.
De esta manera, ssin el espíritu confrontativo del comunicado del martes último, los representantes de Juntos por el Cambio presentaron sus tres condiciones: que le certifiquen que las PASO se van a realizar, que la elección se haga con boleta única de papel y que se rehabilite el voto por correo de los argentinos en el exterior.
Por su parte, Sergio Massa sostuvo: “Quedamos en hacer una segunda reunión con los bloques de los partidos que no son Juntos por el Cambio: la Izquierda y los partidos provinciales. Lo que pretendemos es buscar un consenso general con garantías de participación democrática. Los políticos tenemos que tener la inteligencia de resolver nuestros problemas sin involucrar a la gente, es un gesto de madurez que la gente espera”.
Por el lado de la oposición, el presidente del interbloque de Juntos por el Cambio Mario Negri señaló que fue “una reunión madura, donde planteamos fundamentalmente nuestras dudas. Para JxC el cambio de reglas electoral es un tema muy sagrado en la Constitución, y nosotros lo queremos cuidar. El ministro se comprometió a que el sistema de PASO está vigente”.
En definitiva, primó el sentido común, teniendo en cuenta que, de realizarse las PASO en agosto, coincidiría con los días de mayor frío, lo cual no sería justamente conveniente por el efecto climático provoca en la ola de contagios de Covid.