Mientras ya está pensando en sus vacaciones en Mar del Plata, la gobernadora María Eugenia Vidal sigue pensando en como desdoblar las elecciones de la provincia de Buenos Aires para no cruzarse con Cristina Kirchner pero también manteniendo un puente con Mauricio Macri para no enfrentarlo. De allí que en las ultimas horas afirmó que “no quiero ser gobernadora de Cristina, quiero ser gobernadora de Mauricio, por eso voy ahcer lo que sea funcional a la reelección presidencial de Macri”.
La frase estuvo destinada a tranquilizar al presidente y especialmente a Marcos Peña que se opone al desdoblamiento porque necesita los votos de Vidal ya que la imagen de gestión del presidente en la provincia ronda los 20 puntos. Paralelamente ,Vidal con esa frase da por “segura” su reelección. Veremos, el peronismo y la totalidad de los intendentes estan unidos y presentaran una buena fórmula. Por ahora estan en la grilla Verónica Magario, Martín Insaurralde, Axel Kicillof y Paco Durañora.
Desde el peronismo ya salieron a oponerse al desdoblamiento. El actual presidente del PJ bonaerense, Fernando Gray, afirmó que “es una farsa, no podemos permitir el desdoblamiento que cuesta $ 3 mil millones en una provincia donde los chicos no tienen para comer”. Luego destacó que Vidal “se quiere sacar el lastre” del presidente. Por su parte, la actual senadora y ex presidenta también se opuso al desdoblamiento y afirmó que “hay que trabajar para ganar la Provincia y la Nación”.
Desde el peronismo igual afirman que la lectura de desdoblar las elecciones es errada. Los votos los arrastra Cristina no los intendentes, además que la situación económica continuará pésima, con inflación y un dólar que puede acercarse a los 60 pesos como pide el Fondo Monetario Internacional para 2019.