El gobernador Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se reunieron hoy por casi dos horas junto s aus ministros para evluar cómo seguir con la cuarentena después del 2 de agosto. No hubo una definición sobre si mantendrán las aperturas o darán marcha atrás, sólo ratificaron la decisión de tomar una decisión conjunta en el AMBA, como ocurrió hasta ahora. Mañana se juntan con el presidente Alberto Fernández y definirán qué hacer.
La reunión, que se extendió desde las 10.30 a las 12.10, se realizó en La Plata. Kicillof y Larreta analizaron los números de los contagios junto al jefe de Gabinete bonarense, Carlos Bianco; los ministros de Salud, Daniel Gollan, y de Seguridad, Sergio Berni; y el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli y el ministro Fernán Quirós.
Según informaron desde la Gobernación, los mandatarios “analizaron las variables de la situación epidemiológica y las proyecciones para las próximas semanas” como así también “los esquemas que cada distrito viene desarrollando en el marco del ASPO y alternativas de continuidad, resaltando la necesidad de mantener la coordinación en el AMBA”.
No obstante, aclaron que “las definiciones se tomarán en el encuentro con el Presidente”.
Las diferencias entre Provincia y Ciudad son claras. Pese a la prudencia de ambos gobernantes, sus ministros ya dieron señales de qué pretende cada jurisdicción. Mientras que en La Plata vienen alertando cada día que el sistema de salud no resiste un crecimiento de casos como el actual y puede colapsar en agosto, en el gobierno porteño se muestran proclives a mantener la apertura de mínima como está hoy. En el medio, claro, está el hartazgo social por la cuarentena y la necesidad imperiosa de reactivar la actividad económica, dos factores que seguramente pesarán al momento de la definición.