La Agencia Federal de Inteligencia y el Servicio Penitenciario Federal firmaron en 2018 un convenio secreto que permitió las tareas de espionaje ilegal que llevó adelante el gobierno de Mauricio Macri en la cárcel de Ezeiza sobre los denominados “presos K”, información que era usada para perseguirlos o presionarlos.
Según reveló Página 12, el convenio fue firmado el 8 de junio de 2018 con el objetivo de habilitar actividades difusas y dar pie a la “asistencia tecnológica” de la AFI, como la instalación de micrófonos y cámaras.
El documento es analizado por los fiscales Cecilia Incardona y Santiago Eyherabide, que la semana pasada allanaron distintas dependencias del Servicio Penitenciario Federal.El ex titular de ese organismo, Emiliano Blanco, es quien firma el convenio, mientras que por la AFI lo hace el ex director Gustavo Arribas.
El convenio dice en su cláusula primera “que el SPF se compromete a brindar la información que la AFI le requiera” y que la central de inteligencia “podrá prestar asistencia exclusivamente en cuestiones logísticas, tecnológicas y/o de mantenimiento siempre que resulte necesario para la observancia de las mismas legalmente asignadas”.
Tras descubrir el convenio, los fiscales Incardone y Eyherahibe creen de que desde el Servicio Penitenciario sus “máximas jerarquías” implementaron “un plan para controlar y vigilar todos los movimientos, conexiones y actividades que desarrollaron las personas privadas de la libertad incorporadas por ellos al Programa IRIC (Intervención para la reducción de índices de corruptibilidad), donde alojaban a ex funcionarios acusados en causas de corrupción.
Los allanamientos realziados hasta en Ezeiza en el marco de la causa detectaron que había por lo menos un micrófono y cámaras en el módulo VI, donde estaba el IRIC, además de gran cantidad de cables que permiten deducir que había muchos más.
La excusa para instalar esos dispositivos de vigilancia para espiar fue la presencia del narco Mario Segovia, quien habría sido trasladado allí precisamente para justificar el espionaje ya que tenía riesgo de fuga.