Con bajo perfil y sin aparecer en los medios, la ex gobernadora María Eugenia Vidal trabaja cada día en su candidatura 2021 y, frente a la feroz interna que ya atraviesa Juntos por el Cambio y la nula relación que mantiene hoy con el ex presidente Mauricio Macri, no descarta un plan B: competir por Capital Federal.
En la grieta abierta entre “duros” y “blandos” frente al gobierno de Alberto Fernández, Vidal se posicionó desde el comienzo con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien prepara su “proyecto nacional” para “ganar” las elecciones legislativas del año próximo y las generales de 2023, y minimiza al sector liderado por la presidenta del PRO, Patricia Bullrich.
Larreta apareció en un Zoom de militantes de Juntos por el Cambio en La Matanza el jueves pasado y allí reafirmó su alianza con Vidal. “No somos socios, porque las sociedades pueden romperse y nuestra relación no. María Eugenia y yo somos lo mismo”, sentenció Larreta. Y agregó que trabaja para que Juntos por el Cambio “vuelva al gobierno”.
La difícil carrera de obstáculos de Vidal para volver a Provincia: ahora se interpone Monzó
Vidal lidera la oposición al gobernador Axel Kicillof y pretende encabezar la lista legislativa por la provincia de Buenos Aires en 2021, para luego competir en 2023 por la Gobernación. Pero en medio del río revuelto, aparecen varios competidores internos que podrían frustrar ese plan, entre ellas la ex diputada nacional Elisa Carrió. La líder de la Coalición Cívica se había retirado de la política pero ya está de vuelta y tiene domicilio en la provincia por lo que podría competir. Macri, quien hoy sigue disfrutando de sus vacaciones en Europa, podría apoyar a su aliada en detrimento de la propia Mariu.
La ex gobernadora tampoco debe descartar a Emilio Monzó que, aunque hoy aparece como aliado de Rodriguez Larreta y en el sector de los moderados, tiene una muy mala relación, luego que el año pasado, en el cierre de listas, Vidal se encargo de humillarlo en la cara.
Aunque todavía falta mucho para junio de 2021, cuando deberán definirse las listas, Vidal dio ayer una señal que anticipa un posible plan B. La ex mandataria se mostró cocinando guiso para asistir a familias de la villa 21-24, en el barrio porteño de Barracas, junto a sus hijos. “Hoy es mucha la gente que necesita una mano, un plato caliente. Y cada vez hay más formas de ayudar. Podés pensar que lo que hacés es poco, que no alcanza, pero para una familia que lo necesita va a ser un montón”, publicó la ex mandataria en su cuenta de Instagram, con una foto donde se la ve armando viandas para colaborar con el programa sostenido por el cura Lorenzo “Toto” De Vedia. Y cerró: “Nosotros ya arrancamos. ¡Tenemos que ser más! ¡Sumate vos también!”.
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