Causas muy graves que involucran al presidente Mauricio Marci, como las sociedades offshore que figuran en los Panamá Papers. O la suculenta suma de dinero que tenía en su casa la vicepresidenta Gabriela Michetti. Y ya más recientemente, la denuncia que apuntó al jefe de los espías, Gustavo Arribas, por recibir más de 800 mil dólares en coimas por un valijero brasileño condenado por el caso Lava Jato.
Estos son simplemente algunos de los hechos más resonantes que tienen como protagonistas al mismísimo presidente y a sus más cercanos colaboradores, y que sin embargo fueron desestimados por la Justicia.
Sobre un total de 39 denuncias que involucran a Macri y a miembros de su gabinete, 17 fueron dejadas de lado, sobreseídas o archivadas por parte de jueces que, sin ningún disimulo, muestran así su alineamiento con la Casa Rosada. En otras palabras, el 43 por ciento de esas causas, dejaron de ser una preocupación para el gobierno.
En los despachos oficiales no sólo están convencidos de que desde el kirchnerismo arrecian las denuncias, sino que también se jactan de que la justicia, en este año y medio de gestión de Cambiemos, ya desestimó no pocas causas sensibles.
Y como no podría ser de otra manera, apuntan sus cañones hacia aquellos fiscales que se atreven a impulsar las denuncias, aprovechando para responsabilizar a la procuradora general Alejandra Gils Carbó, a quien tienen entre ceja y ceja.
Otras causas en las que aparecen altos funcionarios de Cambiemos y que terminaron en sobreseimiento, fueron el caso contra el ministro de Modernización, Andrés Ibarra, por la presunta compra de máquinas de votación sin que existiera la ley de la boleta electrónica, la compra de dólar futuro que efectuaron, entre otros, los funcionarios José Torello, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, y un expediente por presunta “incitación a extorsiones” para el traspaso de la empresa OCA.
Y lo que más irritación provoca en el gobierno, es que la persona más denunciada es el propio Macri, quien acumula 17 causas en lo que lleva de su gestión. Después de la investigación por los Panamá Papers fue imputado por el decreto que revivió los pagos por el soterramiento del Sarmiento (donde estaba involucrada Iecsa), el tarifazo de gas y la designación de los jueces de la Corte, entre otras denuncias.
Mientras esperan que los casos que todavía están dando vuelta en los tribunales corran la misma suerte, y por lo tanto pasen al olvido, en el universo de Cambiemos cobran cada vez más vigencia aquellos versos del Martín Fierro: “Hacete amigo del juez, no le des de que quejarse, que siempre es bueno tener, palenque de ande rascarse.”