En un encuentro realizado en Mar del Plata por el Grupo Clarín, Héctor Magnetto abrió la reunión anual de gerentes, donde volvió a criticar al kirchnerismo pero, inesperadamente, cuestionó las políticas del presidente Mauricio Macri.
El CEO de Clarín no hace nada al azar ni improvisa discursos, en realidad quienes conversan con él cuentan que está molesto con el gobierno porque no se decide a meter presa a Cristina, la mayor obsesión del dueño de Clarín. Es que Macri no está convencido de detener a la ex presidenta y prefiere esperar a que haya algún fallo firme de la Justicia que llevará un par de años.
Magnetto criticó ciertas medidas tomadas por el presidente Macri. “El país es incapaz de aumentar la riqueza de sus habitantes en forma sostenible”, dijo, al tiempo que remarcó que “la pobreza crece sostenidamente y se reproduce en un círculo vicioso del cual es cada vez más difícil salir”.
En la misma línea, el empresario expuso una serie de dificultades que afectan al país: exportaciones estancadas, inversiones todavía insuficientes, déficit fiscal agobiante que se cubre con un endeudamiento externo “que no podemos descuidar ni naturalizar” por las experiencias históricas de sus consecuencias.
Según la nota publicada por el matutino, Magnetto hizo hincapié en que “las transformaciones de fondo van a requerir más tiempo, más acuerdos y más riesgos”. Para el CEO de Clarín, este reto involucra a muchos factores de poder de la sociedad que exceden la disputa política.
Más allá del llamado de atención, Clarín no romperá todavía con Macri, quien le entregó demasiados negocios en poco tiempo: la mega fusión de Cablevisión y Telecom, el Futbol pago y el 4G gratis para que compita con Personal y Telefónica, además de mandar a un cajón la Ley de Medios.
En la Casa Rosada se pusieron tensos con las declaraciones del CEO, saben que después de la crítica viene el pedido de un “nuevo negocio” para Magnetto.
1 comentario
Magnetto tiene miedo que lo lleve La Parca antes de darse el gusto de verla a CFK en cana.
Malas suerte: te vas a morir nomás antes de verla presa porque el kilombo que se va a armar el día que intenten detenerla, no lo vas a parar con una tapa de Clarín.