En un día donde la sociedad está preocupada por la escalada del dólar, el fracaso de frenar la inflación y los brutales aumentos de tarifas que se vienen en enero con la luz, el gas y el transporte, se produjeron dos reuniones importantes vinculadas al peronismo bonaerense. Por un lado, Cristina Kirchner visitó Avellaneda donde el intendente Jorge Ferraresi firmó la incorporación de 800 trabajadores a la planta municipal, mientras que el presidente del PJ bonaerense, Gustavo Menéndez junto a Martín Insaurralde estuvieron en la Casa Rosada junto al ministro Rogelio Frigerio.
Cristina afirmó en el anfiteatro de Villa Dominico que “voy a ser todo lo que esté a mi alcance para contribuir y lograr que el 10 de diciembre del 2019 otro argentino esté en la Casa Rosada para conducir los destinos del pueblo pero lo que es importante es tener la suficiente amplitud y generosidad para no preocuparnos tanto por los nombres”. Luego advirtió que “hay que garantizar que quien ocupe nuevamente en nombre del pueblo vaya a respetar el mandato popular”.
Asimismo, le pidió a la militancia que sean “lo suficientemente amplios y generosos para lograr esto” y apostó: “Vamos a construir una alternativa política que permita que la gente vuelva a estar alegre y lo más importante no va a ser el nombre sino lograr una fuerza política que no se termine en una sola persona sino que garantice a los ciudadanos de a pie estar tranquilos y no ser traicionados”.
Por su parte, el intendente Ferraresi no solo repudió la firma del pacto fiscal de la provincia de Buenos Aires, sino que anunció un aumento del sueldo municipal del 30 por ciento y la promesa de que para el 2018 los trabajadores municipales estén en planta permanente “para que nadie venga y pueda precarizarlos”. Luego destacó que el año próximo vamos a invertir $ 1400 millones de fondos propios en obras públicas.
Estuvieron presentes los diputados y diputadas nacionales de Unidad Ciudadana Vanesa Siley, Magdalena Sierra, Hugo Yasky, Walter Correa y Abel Furlán. Así como también la jefa de bloque de senadores provinciales María Teresa García
En la Rosada. El flamante presidente del PJ bonaerense e intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, quien hoy fue cuestionado por su pares por firmar el Pacto Fiscal junto a María Eugenia Vidal, junto a Martín Insaurralde, intendente de Lomas de Zamora y Mariano Cascallares de Almirante Brown, se reunieron con el ministro Rogelio Frigerio para analizar la llegada de obras de Nación hacia los municipios. De la reunión participaron sorpresivamente el randazzista Eduardo Bali Bucca y el diputado Diego Bossio.
Insaurralde contó que analizaron una agenda para armar las obras de infraestructura y el programa de recuperación y puesta a cero de villas del conurbano. Por su parte, Menéndez expresó que “hablamos de la relación de los municipios gobernados por el peronismo con el gobierno nacional, que es una relación necesaria. En la Provincia tuvimos la oportunidad de trabajar varias cuestiones que no habíamos podido realizar hasta el momento con la Nación”.
Luego reiteró que el próximo 16 de febrero será el primer Congreso del PJ Bonaerense, aunque aún no está confirmada la sede: “Será en el interior. El peronismo tiene que tener un discurso para el interior de la provincia de Buenos Aires teniendo una mayor presencia de los cargos importantes del Consejo”.
Intendentes enojados con la nueva conducción del PJ bonaerense