De manera sorpresiva, Cristina Kirchner viajará esta noche con destino a Cuba para visitar a su hija Florencia. Sin embargo, según confirmaron voceros del Frente de Todos, el viaje estaba programado y la senadora tiene previsto regresar el próximo lunes al país.
La explicación sobre la presentación horas antes del viaje, fue que se hizo para evitar filtraciones y especulaciones. “Siempre se filtra información desde Tribunales”, se quejaron sus colaboradores.
Mientras, el viaje obligó a reprogramar la saga de actos y presentaciones de su libro “Sinceramente”. Para este fin de semana se había pautado que lo haría en La Matanza pero ahora se pasó para el 20 o 21 de septiembre.
Ese corrimiento obligó, también, a cambiar otra fecha: el 20, CFK estaría en Salta, junto a los candidatos del Frente de Todos en esa provincia que elije gobernador con fecha propia -primarias el 6 de octubre, generales el 10 de noviembre-. Ese acto se hará, finalmente, el 28.
La ex presidenta había viajado por última vez a la isla caribeña el pasado jueves 22 de agosto para visitar a su hija que se encuentra en ese país recibiendo un tratamiento médico y continúa internada.
En aquella oportunidad la senadora había solicitado autorización para viajar a La Habana por cuarta vez por “razones personales” que no fueron detalladas, aunque se conoce que realiza sus viajes a la isla para visitar a su hija, que se encuentra enferma y recibe tratamiento médico.
A mediados de marzo, la candidata del Frente de Todos dio a conocer mediante un video que la joven atraviesa un cuadro de salud que le impide regresar a Argentina.
Florencia se encuentra desde principios de 2019 en Cuba, donde lleva adelante un tratamiento médico con autorización judicial del Tribunal Oral Federal 5, que prepara el juicio por las causas “Hotesur” y “Los Sauces”, donde está pendiente de ser juzgada por presunto lavado de dinero.
En el parte médico que se envió desde La Habana para presentar en el TOF Nº 5, los médicos Charles Hall Smith y Roberto Castellanos Gutiérrez afirmaron que la hija de la ex mandataria tiene trastorno de estrés postraumático y sumó otros diagnósticos, como síndrome purpúrico, que se traduce en manchas en la piel; una polineuropatía sensitiva desmielinizante de la que no se conoce el origen, pero se trata de un trastorno neurológico; y amenorrea, que es ausencia de menstruación, y suele estar asociada a trastornos alimentarios: esta hipótesis se refuerza con otro punto del parte donde dice que Florencia tiene bajo peso corporal.