Anoche, Juan Amorín estrenó su programa propio en C5N, “Conflicto de intereses”, y arrancó con todo: reveló cómo el macrismo se quedó con la empresa de obra pública Supercemento para recaudar millones de pesos de forma irregular, que iban a parar a los bolsos PRO para su campaña política.
Lo hizo a través de documentos y de una declaración clave por parte de un testigo encubierto que denunció tener pruebas de los “sobornos en AySA”, la empresa estatal de Agua y Saneamientos Argentinos, durante el gobierno de Mauricio Macri.
En su declaración, el testigo manifestó: “Adjunto pruebas de cómo Supercemento generó $ 300 millones en negro para el pago de sobornos en la obra de AySA y otras”. Y sigue: “Cuando Mauricio Macri entró a la política, mucho antes de ser presidente, conocía perfectamente cómo funcionaba la obra pública; y unas pocas empresas se repartían las grandes obras y una vez que tenían los contratos por los abultados costos de operación, recurrían al truco de redeterminación de precios, llevando los contratos al doble o al triple de lo firmado”.
Y continuó: “Para que una obra pública costara tres veces más de lo pactado se podía argumentar que los precios de la mano de obra y los materiales aumentaban con el tiempo, sumado a que los plazos nunca se cumplían. Otro método muy ingenioso era comprar muchos más materiales que los que la obra necesitaba”, detalló el testigo protegido.
En la declaración, insinúa que ese dinero obtenido se repartía entre funcionarios y Macri para financiar la campaña por la reelección del ex presidente.
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Fueron son y seran MAFIOSOS CHORROS!!!!!!