Mauricio Macri denunció que recibió una amenaza de muerte a través de la red social Twitter. A una semana del intento de magnicidio contra la vicepresidenta Cristina Kirchner, trascendió la noticia de la denuncia que presentó la custodia del ex mandatario en los Tribunales de Comodoro Py por un posteo amenazante de un usuario al que su cuenta ya fue dada de baja.
La Dirección General de Seguridad Presencia y Protección de Estado de la Superintendencia de Seguridad y Custodia, dependiente del Ministerio de Seguridad, fue la encargada de llevar a cabo la denuncia. El organismo protege a Macri por tratarse de un ex presidente.
“¿Cuánto me pagan por ir a matar a Macri y a la mierda que lo rodea?”, escribió el 30 de agosto pasado el usuario @Luisanfer2442, quien en su perfil muestra que se llama “Luis Fernández” y que nació el 10 de septiembre de 1972. La cuenta, cuya ubicación dice que es de Las Heras, Santa Cruz, fue deshabilitada tras la denuncia.
La denuncia recayó en el juzgado federal N° 15, a cargo de la jueza María Alejandra Capuchetti, quien actualmente investiga el intento de asesinato contra la ex presidenta que tiene como principales acusados a Fernando Sabag Montiel y a su novia, Brenda Uliarte.
Al tomar conocimiento de la amenaza contra Macri, desde el Juzgado procedieron al inicio de actuaciones sumariales, se ordenó la elaboración de un “informe de la cuenta amenazante”, y se dispuso el análisis y disposición de nuevas medidas.
Ante esta noticia, inevitablemente reaparece aquel entrañable personaje de China Zorrilla, cuando en la película “Esperando la carroza”, se queja de que su vecina la imitaba en todo lo que hacía, por lo que lanzó una frase que se transformó en todo un símbolo que bien podría aplicarse a la denuncia de Macri: “Yo hago puchero, ella hace puchero. Yo hago ravioles, ella hace ravioles”.