Se veía venir: tanta armonía y tan perfecta sintonía reflejada el sábado en la inauguración de la muestra, iba a tener su recompensa. Pasadas las elecciones de octubre, la Sociedad Rural Argentina hará su ingreso formal al gobierno del presidente Mauricio Macri.
Por estas horas, ya se da prácticamente por hecho que Luis Etchevehere, el titular de la entidad ruralista se incorporará a la administración de Cambiemos como ministro de Agroindustria, en reemplazo de Luis Buryaile sobre quien, dicen, “ya cumplió una etapa”.
De esta manera, Macri premiará, más que a un dirigente, a un organismo que, como la Sociedad Rural, representa y es el símbolo máximo de la más rancia y tradicional oligarquía en el país, ya desde los tiempos de su creación, allá por 1.866, entre cuyos “ilustres” fundadores aparecía un tal Martínez de Hoz…
Durante la inauguración de la muestra el sábado último, Macri fue vitoreado y despertó aplausos y admiración entre la concurrencia, tal como ocurría con los jerarcas de las distintas dictaduras cuando se hacían presentes en ese ámbito.
Por eso mismo, no es casual ni un dato menor que el presidente le reserve un lugar en su gabinete ministerial a Etchevehere, sobre todo después de su encendido y ovacionado discurso, en el que, como no podía ser de otra manera, acusó a Cristina Kirchner de todos los males.
En referencia a todas las encuestas que ubican en primer lugar a la ex presidenta para las PASO, el titular de la Rural recurrió a la campaña del miedo, y dijo que “volver al pasado es volver a la pobreza, al desprecio por las instituciones republicanas, a la mentira, a la demagogia y a la estafa como recursos políticos”.
Y no se quedó ahí: “Volver al pasado –aseguró- es volver a Venezuela como modelo, y al insulto y la soberbia por cadena nacional”.
Mientras tanto, los grandes medios siguen ocultando que Etchevehere fue acusado por fomentar el trabajo esclavo en sus campos de Entre Ríos, o que la justicia investiga maniobras que habría ejecutado el presidente de la Rural a través de sus empresas, sospechadas de vaciamiento y desvío de fondos provenientes de la emergencia agropecuaria.