La Nación y un repudiable ataque a los pobres del conurbano

Un miserable Pablo Sirven, publicó una execrable editorial en el diario La Nación, mostrando lo peor del gorilaje argentino al afirmar que “este año la madre de todas las batallas será en la provincia de Buenos Aires, ese territorio inviable en cuyo africanizado conurbano se deciden electoralmente los destinos de la Patria”.

Tratar a los habitantes del Gran Buenos Aires de “africanos” nos lleva a la misma comparación de la década del cuarenta con la llegada de los inmigrantes del interior del país que venían a la Capital Federal y sus alrededores en búsqueda de nuevos trabajos en las florecientes fábricas nacidas bajo el gobierno peronista, y qué eran llamados por la oposición “cabecitas negras” o “aluvión zoológico”.

Más allá del desprecio por los argentinos humildes que habitan el Gran Buenos Aires, la editorial de Sirvén está llena de errores y mentiras demostrando su desconocimiento e ignorancia del territorio. Según Sirvén, el Frente de Todos sacó su gran diferencia en la “segunda sección electoral”. En realidad la 2ª sección la integran ciudades del campo como Pergamino, Arrecifes, Baradero San Nicolás y San Antonio de Areco donde las elecciones de 2019 fueron muy parejas. Claro, Sirvén quiso referirse a la tercera sección electoral que abarca La Matanza, Lomas de Zamora, Lanús, Avellaneda, Almirante Brown, Quilmes, Florencio Varela y Ensenada entre otras localidades, donde el Frente de Todos arrasó en las elecciones por más de 30 puntos a Juntos por el Cambio (60 a 30), pero no hay que olvidarse que en toda la provincia Axel Kicillof le sacó 15 puntos a María Eugenia Vidal.

Sirven está preocupado porque dice que Vidal no quiere presentarse en la Provincia para jugar en el confort de la Capital Federal y disputarle la jefatura porteña a Martín Lousteau. Según el periodista, Vidal no quiere jugar en la provincia porque “ganaría” y entonces no podría ser candidata para suceder a Rodríguez Larreta en 2023.

En realidad, “La Leona” no quiere jugar en territorio bonaerense por su pésima gestión y porque una nueva derrota la sacaría del juego político para siempre. Ella sabe que en sólo dos años, la gente no se olvidó del maltrato a los maestros, al personal de salud, ni del cierre masivo de Pymes, mayor inseguridad y un banco Provincia dedicado a la timba de las Leliq en vez de ayudar al pequeño empresario.

Vidal, además de saber que el peronismo se presenta unido en el 2021, deberá lidiar con Elisa Carrió y media docena de dirigentes que ya afirmaron que quieren ir ellos por la Gobernación. Volver a perder por 15 ó 20 puntos sería catastrófico para su carreta política, de allí que mantiene silencio mientras espera a tener publicado su libro en marzo de este año.

Como vienen señalando muchos colegas, el ex presidente Mauricio Macri habría adquirido parte del diario de los Mitre y de allí que Sirvén reivindica su figura como “líder natural del espacio” y su frecuentes y contundentes salidas a los medios, como la reciente carta para que “abran las escuelas”, adelantando que en las próximas semanas volverá a recorrer las playas de Pinamar.

Pasaron setenta años y los epítetos descalificatorios hacia hacia el peronismo y los humildes se repiten una y otra vez: “Chusma”, “aluvión zoológico”, “negros de mierda”, “alpargata”, “fascismo”, “segunda tiranía” o el “viva el cáncer” por Eva Perón.

Finalmente llega la pregunta: ¿Ya salió el repudio de ADEPA y FOPEA por el artículo racista y discriminatorio de Pablo Sirvén?

Me parece que no.